jueves, 25 de febrero de 2010

Pasen sin llamar

Mes de visitas esperadas e inesperadas que se apoderan de nuestra rutina y dejan sobre la mesa ricas conversaciones y puntos de vista en varios idiomas. Transcurren los días con huéspedes en el salón y con amigos que entran hasta la cocina. Algunos repiten y la casualidad hace que, tres años y varios países de por medio después, Buenos Aires haya sido la ciudad que nos ha vuelto a juntar. Hay gente que realmente es un placer. Ojalá sigamos encontrándonos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si si si