miércoles, 26 de septiembre de 2012

La Hermana Pobre


Cuando estudiaba audiovisuales,  todas las asignaturas relacionadas con la radio la definían siempre como “la hermana pobre” y había un halo de reliquia, de cariño y antiguo alrededor de ella. Casi, que en nuestro inconsciente, nos predestinaban a que empezásemos a dar por obsoleto un medio de comunicación que poco tenía para competir con las nuevas tecnologías.

He de confesar que yo nunca fui una gran oyente de radio y que, aunque dista mucho de quedarse obsoleta, nunca le adjudiqué el valor real que tenía. Escuchaba algún programa, de vez en cuando y sin fidelidad, más por acaso que por deseo, en el auto, en el bus, o porque algún compañero en el trabajo la ponía.

Ahora en cambio, llegada a mi nueva vida en la Comarca Andina la radio se vuelve un instrumento fundamental para la supervivencia. Las radios locales difunden sus señales  en varias frecuencias de am y fm, y nadie en la zona, es ajena a ellas. Todo lo que debe saberse, se comunica através de las ondas  y llegan hasta todos los hogares, comercios y recintos. 

Y cuando digo todo lo que debe saberse, me refiero a todo. La radio está al servicio del pueblo y es para su comunicación por lo que, además de programas, música y noticieros, la parte que nadie se pierde (y si la tenías apagada sintonizas a todo correr en los horarios fijados) son los de comunicados, donde, el locutor o locutora anuncia ofertas de trabajo, avisa que es la época de siembra del tomate, notifica que la escuela nº41 permanecerá cerrada todo el día por haberse inundado con las lluvias de anoche, comunica que el día jueves se está procediendo a la verificación de motores en la gendarmería, y difunde que el sábado alguien perdió un llavero con una foto de un niño y varias llaves, una de ellas de un auto, por favor si alguien las hubiese encontrado sería de agradecer que las llevase a la emisora…

Así uno se entera de que Juanita tiene que personarse en el juzgado y que la Afip vendrá los días tal y tal para la realización de trámites, que son rebajas en el comercio de Moda Shop y que en el Centro de Integración dan cursos de corte y confección gratuitos.
Entonces hoy dice el profesor en clase (en clase de cultivo, donde somos unas 40 personas) que vamos a ir un día a una plantación para ver el sistema radicular. Pregunta como nos avisamos y nadie duda que através de la radio. Porque aquí lo único que todo el mundo tiene es radio, internet no llega apenas fuera de los núcleos urbanos, y en los núcleos con cuentagotas.

Ahora solo queda ponerse de acuerdo en la emisora. 

viernes, 21 de septiembre de 2012

Perlas de Lluvia



El árbol de mi vecino se ha puesto un collar de perlas. Se enojó con violencia ayer a la noche cuando el viento le contó que las mimosas ya habían florecido y que los ciruelos ya vestían frágiles vestidos de colores, adornos y colgantes. Los aromas que venían en los susurros de Eolo entristecieron al desnudo árbol que, con profunda rabia, lloró toda la noche.

Hoy por la mañana, en cambio, se despertó radiante. Estaba ansioso y apenas conseguía esperar a que el sol sobresaliese por encima del Piltri para, con los primeros rayos, sonreír en destellos de mil colores.

El árbol de mi vecino brilla en perlas de cristal. Lágrimas de lluvia con las que se ha tejido un collar para él también estar hermoso y atractivo en este baile de gala  que se prepara, ahora que dicen, de a poco, se acerca la primavera.





lunes, 3 de septiembre de 2012

Primero fue la Mujer y luego el Hombre


Ayer por un problema de horario no pude asistir a la clase de Yoga para embarazadas y fui a una de Yoga con gentes de ambos sexos y vientres planos. Mientras me sacaba los zapatos un chico sentado frente a mi entabló conversación típica de meses, movimientos y posible fecha de parto. Se levantó, colocó su mano sobre mi hija y con una amplia sonrisa dijo:
-Ojala sea varón.
Y se fue feliz, quizá pensando que me había bendecido o algo por el estilo.

No es la primera vez que escucho un comentario semejante. Desde el principio nosotros creímos que era niña, pero podía haber sido niño tranquilamente y sus padres íbamos a ser igual de felices, ni más ni menos. Pero el entorno, en general, parece que no. No se si saben la cantidad de veces que, antes de estar confirmado el sexo todo el mundo apostaba, casi con esperanzas, a que fuera niño.
es ella y le toca las narices que que otros opinen...
Los comentarios que se escuchan van desde simples “¡¡ay que sea niño!!” hasta salvajes “¿estas segura que es niña? ¡Porque estás muy guapa!” y la gente se te quedan tan feliz y sonriente, mirando, esperando que vos, embaraza, ergo mujer que un día fue niña, sonrías y colabores con esa mediocre y sexista convicción que, os aseguro me tiene podrida, mantiene el privilegio del primogénito varón. 

¿Sabían que todos, absolutamente todos, durante los primeros meses de vida somos mujeres? Luego algunos cambian de sexo allá por la semana 10 de gestación y, a raíz de una fuerte lluvia de testosterona, desarrollan genitales masculinos y posteriores diferencias físicas y psíquicas. Pero esas diferencias, son solo eso, diferencias. No hacen a los bebés ni mejores ni peores…  de eso nos encargamos luego nosotros, con comentarios inofensivos o historias de costillas que educan desde la panza.