domingo, 25 de abril de 2010

Veo Veo

Como quién adivina formas en las nubes, el hielo se esculpía en reflejos y fantasía.
Os invitamos a jugar con nosotros.
-¿Que ves?
-Empieza por la P...

lunes, 19 de abril de 2010

Viaje al Fin del Mundo

Salimos con la mochila llena de nervios y a todo color, olores de casa y costumbres de siempre: familia. Un regalo sin igual para unas vacaciones más que deseadas que nos llevarían hacia un viaje único: Patagonia Sur.

Para poder llegar desplegamos alas y dimos vuelta a las brújulas. Aterrizamos dónde el sur no podría serlo más, dónde el fin podría volverse principio, dónde el tiempo deja de importar y vuelta a empezar. Llegamos al Fin del Mundo con una expedición de soñadores.
Atanase, la comandante en jefe, con 82 años dedicados al arte de soñar, vio cumplidos sus deseos de contemplar los témpanos que navegan a la deriva a orillas de los Andes. Tembló de ilusión en una primera panorámica del glaciar Perito Moreno, pero la barrera de icebergs que bloqueó la navegación hacia el Upsala mereció sus lágrimas más reservadas. Las pequeñas gotas de agua salada rodaron sobre el gran lago Argentino y, con el reflejo del sol, dieron origen a un arco iris perfecto que nos acercó más aún a la inmensidad helada.
Junto a ella, Ama Ido, estratega sin igual, salió de casa dejando el listón bakiotarra bien alto y cuestionando cualquier termómetro: menos tres grados y manga corta ¡aupa ahí! Pero la resistencia climática no le fue suficiente a esta guerrera contemporánea que sucumbió ante el espectacular rugido de los hielos eternos.
En perfecta armonía, su compañera de batallas y a quién debemos este sueño cumplido, Ama Ici, detonó emociones y risas llevándonos por un campo minado de buenos momentos y anécdotas para no olvidar. Batió records mundiales de ilusión y satisfacción, disfrutó del rally Argentina dakar y sintió un parentesco con los Yámanas, antiguos habitantes de Tierra del Fuego. Esta bomberwoman del entusiasmo nos guió hasta islas pobladas de aves y lobos marinos y hasta historias que se remontan 7000 años atras dónde solo las mujeres tenían permitido nadar.
Asier estalló en chispas por tantos descubrimientos inimaginables y celebró, a pleno pulmón, cada encuentro con la fauna más exótica y la naturaleza más salvaje. Su mirada se coló en nuestros ojos y de pronto los prejuicios desaparecieron haciéndonos ver el mundo como si fuese la primera vez.
Y es que era la primera vez.
Lo contemplamos, lo fijamos en la retina y por las noches, con el pijama puesto y los ojos cerrados, el pequeño gran Asier junto con la gradiosa littel Maddi, dibujaban la memoria de los días.
Maddi, siempre a la última moda, subió más alto de lo que había subido nunca y galopó con la sonrisa más espléndida y la habilidad más reveladora. Aprendió rápido y siguió creciendo con la humildad e inteligencia de quién pregunta lo que no sabe.
Un día, de repente, alguien se acordó de su casa y dijo que tendrían que pensar en volver a Bakio. Poco después les llegó la hora y se subieron de vuelta a las nubes dejando clavada su presencia en la ciudad.
Dunático y dunática, pues os podéis imaginar, aún sin palabras por lo grandioso del viaje, vibrando a más no poder y alimentando nuevos sueños e ilusiones.
Eskerrik asko bidaigatik familia!

lunes, 5 de abril de 2010

Parabêns

Há muitas formas de festejar os anos, desta vez començei a nova etapa cumprindo desejos, sonhos e observando maravilhas...Existem coisas que pensas que nunca vais vivenciar, outras que estão tão longe do teu imaginário que inclusive pensas que jamais podes fazer parte delas.
Apaguei as velas frente ao glaciar Perito Moreno e viajei entre icebergs.